Primero los escuchas. Un largo resoplo, ardiente. Luego con suerte se consigue ver un chorro de espuma blanca.
La atracción verdadera del archipiélago de Vava’u son las ballenas. Se dejan ver a pocas esloras de nosotros. A veces justo delante de nuestro fondeo, a veces nadan hacia nosotros justo en el pase por los arrecifes de coral. En este momento ambos empezamos a dar vueltas, como si fuera una la regata de la Copa de América. ¿Quien puede pasar primero? Por supuesto ellas, a ellas les pertenece el mar. Nosotros somos los invitados, y cortarles el paso tampoco nos parece buena idea.
Sus cuerpos azabaches arquean varias veces fuera del agua, respirando profundamente. A menudo entre dos dan vueltas, es tiempo de apareamiento. ¡Hola cariño! Luego se ve por ultima vez su chepa, seguida de su cola majestuosa. Y ya se hunden de nuevo a las profundidades del Océano.
Ya teneis una caña suficientemente grande para pescar un bicho de estos ?
Hola, que chulas las fotos de las ballenas. Nosotros también nos hemos cruzado con varias ballenas pequeñas. Nunca había visto tantos aquí en el mediterráneo. Ron ya se está volviendo un marinero poco a poco. Muchos besos
Hans e Imma, eso no vale. Eso no es un reportaje, es un poema. Y claro, sumamente seductor, como para morirnos de envidia. Hecho con alevosía y premeditación, seguro que es querellable. Que quiere decir que os queremos.