¡Por fin! Después de una odisea larga finalmente las baterías llegaron a bordo del TUVALU. Después de instalar todo volvemos a tener energía a tope a bordo. Tiempo para volver a hacer excursiones.

En la isla Florena Imma y Beat exploran la tierra, mientras yo me sumerjo a las profundidades del océano. Excepcional como los leones marinos juegan con nosotros debajo del agua. Mas tarde navegamos a Isabela, la isla mas dormida de Galápagos que nos permiten visitar con TUVALU. Fondeamos justo al lado de un grupo de pingüinos. Y enseguida nos sube de nuevo un león marino a bordo.

Isabela  “está cubierta por enormes cantidades de lava negra que se ha desbordado de los inmensos cráteres, como el hollín que se sale de la caldera en que se le hace hervir, o se ha escapado por los pequeños orificios de los lados del cráter. En su caída han cubierto estas lavas gran parte de la costa.” Para comprobar la descripción de Charles Darwin, y para mover nuestras piernas un poco antes de largos días de travesía en alta mar, subimos al volcán sierra negra. Un desierto de color negro – marrón – rojo. Y delante nuestro el océano inmenso y azul.