Navegas por medio mundo y luego eso: Estamos colocados detrás de una isla con una „appearance rather of barrenness then fertility“ (una apariencia mas de aridez en lugar de fertilidad). Y ni siquiera una protección razonable contra el mar de fondo nos proporciona Keepel Islands. Ahí donde después de 60 horas navegando podemos echar finalmente el ancla. Deberíamos haber hecho caso a James Cook, cuando navegó aquí el 26 de mayo de 1770.
Zarpando en Scarborough recorremos con Markus Lauber las primeras 500 millas hacia la Gran Barrera de Coral. Vaya comienzo de temporada; sopla con 30 nudos, olas considerables de tres metros, lluvia. Nos dirigimos al norte, hacia el calor del invierno australiano. Con gorro de lana, bufanda y calcetines gruesos surfeamos las olas por la noche. Una corriente potente, a veces en favor y a veces en contra, según la marea de cinco metros.
La próxima parada la realizamos en Pearl Bay. Aquí realmente estamos tranquilos. Maravillosa playa de arena, un escenario impresionante de la naturaleza. Tal como uno se imagina los trópicos. Pero bañarse no toca. Los gorros de lana, los osos polares… y por un comentario en la derrota copiada de nuestros amigos navegantes de ULANI: El cocodrilo está justo debajo del barco. Ahora si, menos fertilidad nos gustaría.
P.D. Después de otra travesía de noche llegamos a Marina Mackay. Markus vuela de regreso a Beijing, Imma llega desde Barcelona. ¡¡ Más imágenes encuentras en la sección MEDIA, o bien directo aqui. !! Y donde esta todo esto en la sección POSICION, o bien aquí.
Que bueno Hanse, poder oler esos mares que tambien fueron nuestros antaño, a traves de tus posts, me produce una extraña sensacion de emocion y morriña, y como no, de envidia sana.
Pero a penas me dura un minutoby medio.
Por favor escribe MÁS.
Os quiero hermanitos
El Tuvalu surcando de nuevo los océanos en búsqueda nuevas experiencias y emociones. Pero como ya sabéis, lo mas bello es poder compartirlo y nada mejor con un barco navegando en conserva como fue tan lindo con vosotros el año pasado. Os echamos de menos, hermanos del mar (¡y de tierra!)…