Después de cruzar el atlántico se nos considera como navegantes de verdad. Ayer hicimos otra travesía heroica. De la cala „Petite Anse d’Arlet“ a „Grand Anse d’Arlet“. Impresionantes 0,8 millas náuticas. Queridos lectores: ya sabéis que ¡ningún mar nos asusta!
También hemos pasado por la roca del diamante, el Diamant Rock. Un islote de 175 metros de altura en medio del mar. Los ingleses conquistaron en 1804 Martinica y fortificaron la roca con 18 cañones y 120 hombres. De tal manera podían interrumpir durante 17 meses el trafico naval entre Martinica y Santa Lucia. Curiosamente esta roca fue incluida ,como buque, en el registro marítimo de la armada inglesa (bajo el nombre „HMS Fort Diamond“ ), a pesar de que este „barco“ no ha navegado ni un milímetro. En 1805 una flota mixta de franceses y españoles (¡bravo!) con 18 buques reconquistaron heroicamente la roca.
Según la leyenda dejaron varado en la orilla de la roca del diamante una nave sin tripulación y 50 bidones de ron. A consecuencia los británicos se rindieron sin mas. Es un cuento bonito y muy popular, pero falso.
Bueno, ayer al menos navegamos casi una milla, superando el promedio histórico y sin beber ni una copa de ron. Y todo es verdad. Casi.
cuidadin con cruzar las calles sin mirar.
Hallo Hans & Imma,
tolle Reise und immer gute News. Weiterhin viel Glück in der Karibik. Liebe Grüsse aus dem winterlich kalten Saas-Fee mit stahlblauem Himmel. LG
Katharina und Kurt, Flor do Mar