Levantado.  Inmovilizado.  Hibernado.  Llevado con la grúa al varadero. Con el equilibrio frágil,  pero sostenido por soportes, ahí  en la adversidad de su ubicación antinatural….

Un cambio de aire siempre va bien, pensábamos.  Así es como colocamos el TUVALU en tierra.  En concreto en el hermoso puerto deportivo de Rebak en Langkawi, un antiguo lago del cráter de un islote rodeado de selva tropical. Un resort de cinco estrellas, con piscina, playa de arena fina.  Wow.

De regreso a Barcelona, ​​la familia, la urbanidad, vida en tierra.  Olvidados son los peligros de la navegación oceánica; anclas deslizantes, redes de pesca flotantes, motores de barcos tartamudeando, oficiales de inmigración confusos y frentes de tormenta amenazadores.

Una caminata inocente en tierra, Imma se cae, la pierna se rompe en dos.  Levantada.  Inmovilizada. Hibernada. Llevada con silla de ruedas. Con el equilibrio frágil pero sostenido por soportes, ahí en adversidad en su ubicación antinatural….

PD. Más imágenes aquí: