Zapatero se va, Rajoy llega, el gobierno helvético cambia, la bolsa baja, el CO2 sube, la deuda de España igual (..y también todo lo que nos hemos perdido últimamente). Como siempre, el mundo esta loco. Pero en nuestro barquito todo sigue igual. Día por día. Lo único que sube y baja son las olas. Sin cansar. Tal vez estáis pensando: ¡Ay! Tan lejos y solitos en este mar tan grande. La barca pequeña y el océano tan inmensa. Pero nosotros no lo sentimos así. El mar nos parece siempre es igual de grande. 360 grados de horizonte y solo agua salada. La misma impresión desde le segundo día.

Pero hoy no. Hoy también aquí fuera todo es diferente. ¡Estamos exactamente en medio del atlántico! 1350 millas desde Las Palmas, 1350 millas hasta Martinique. Pero por supuesto hemos hecho una celebración. El cruce de la línea virtual celebramos con una comida especial. Barco español, capitán suizo. Fondue de queso, vino blanco Protos, chocolate de postre. Si, es verdad, un fondue de queso en medio del atlántico es un poco surreal. Olas en la cacerola del fondue se puede evitar metiendo el tenedor con pan. No lo explican en las recetas, pero funciona.

NB. Si nos dejáis comentarios en el blog: De momento aquí fuera no lo podemos leer (el contenido de blog enviamos a través de onda corta / sailmail). Pero llegando al caribe con buena conexión de internet si. Y lo haremos encantadísimo. Ahí también vamos a colgar fotos y videos.